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En febrero de 2025, el índice de precios al consumidor de España (IPC) aumentó en un 0,4% en comparación con el mes anterior, elevando la tasa de inflación anual al 3%, la más alta desde junio de 2024. Esto marca el quinto mes consecutivo de la inflación creciente, principalmente impulsada por el aumento de los costos eléctricos.
Los precios de la electricidad impulsan la inflación
El aumento en los precios de la electricidad es un contribuyente significativo al aumento de la inflación. Este aumento se debe en parte al restablecimiento del 21% del IVA en electricidad a partir del 1 de enero de 2025, después de un período de tasas reducidas.
Los precios del combustible ofrecen un ligero alivio
A pesar del aumento general de la inflación, los precios del combustible han proporcionado un respiro. En la semana del 18 al 24 de febrero, los precios de la gasolina disminuyeron en un 0.19%, promediando € 1.570 por litro, mientras que los precios del diesel cayeron un 0.13% a € 1.498 por litro. Durante el mes pasado, los precios de gasolina y diesel han disminuido en 0.57% y 0.53%, respectivamente. Sin embargo, desde el comienzo del año, la gasolina ha aumentado en un 2,21% y diesel en un 3%.
Tendencias de inflación del núcleo
La inflación central, que excluye productos alimenticios y energéticos sin procesar, disminuyó en tres décimas de un punto porcentual a 2.1% en febrero, la tasa más baja desde diciembre de 2021. Esto sugiere que las presiones de precios subyacentes pueden estar aliviando.
Índice armonizado de precios al consumidor
El índice armonizado de precios al consumidor (HICP) se mantuvo estable con un 2.9% interanual en febrero, con un aumento mensual del 0.4%. El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) publicará los datos finales del IPC para febrero del 14 de marzo de 2025.
En resumen, la tasa de inflación de España aumentó al 3% en febrero de 2025, impulsada principalmente por precios de electricidad más altos después del ajuste de la tasa de IVA. Si bien los precios del combustible han disminuido ligeramente, su aumento anual hasta la fecha continúa afectando a los consumidores. Sin embargo, la disminución de la inflación central ofrece un rayo de esperanza para estabilizar las presiones de precios subyacentes en los próximos meses.